Quien deja de aprender, deja de vivir.
Anónimo.
Entrada del museo. |
Primeras muestras:
En las puertas y paredes de un museo la
historia se va mostrando atizando al conocimiento; y resplandece su luz a quienes
van por conocer memorias, de un pasado místico allí revelado.
Craneos de la evolución de los primates. |
Primitiva Lucy. |
Lucy: una hembra adulta que bautizaron con ese nombre- reconstruida a partir de los
datos que aportó el esqueleto descubierto en Etiopía -, es de las primeras
imágenes exhibidas dentro de este recinto, que figura entre los más
significativos de América Latina, situado en el Bosque de Chapultepec, donde se
le mide el pulso al corazón historiográfico de México.
La familia de australopithecus afarensis datan
de aproximadamente 3, 5 millones de años e inaugura las exposiciones del Museo
Nacional de Antropología, ubicado aquí en el Distrito Federal, la ciudad de los
mexicas.
Parece como si las piezas encontradas cobraran
vida y en suma complicidad con el espectador, pudieran salir de los cristales
protectores para conducir a los de esta era, a tiempos fascinantes en los
cuales las piedras atestiguan el surgimiento y el desarrollo de disimiles
culturas.
Vamos apreciando las transformaciones de los
homo habilis, homo erectus, neandertales, homo sapiens, quienes por solo
mencionar costumbres más notables, tallaban las piedras hasta hacerlas filosas,
se alimentaban de lo que cazaban y las hembras daban a luz a sus crías,
sostenidas de un tronco, con otra primitiva que miraba, como salía del árbol de
la creación, el fruto de otra especie humana.